22,560 |14/05/2019
I
Yo era como un bote a la deriva en el mar.
Tú me escogiste, y me condujiste a un refugio.
Ahora en Tu casa, en la calidez de Tu amor,
estoy completamente en paz.
Tú me bendices, me das Tus palabras de juicio,
y aún así no logro atesorar Tu gracia.
A menudo me rebelo, hiriendo de algún modo Tu corazón.
Pero Tú no me tratas según mis pecados
sino que obras por mi salvación.
Cuando estoy distante, me rescatas del peligro.
Cuando me rebelo, escondes Tu rostro
y la oscuridad me envuelve.
Cuando regreso a Ti, muestras clemencia,
sonríes para abrazar.
Cuando Satanás me atormenta,
curas mis heridas, calientas mi corazón.
Cuando el diablo me hiere, estás conmigo en el prueba.
El amanecer llegará pronto,
y los cielos brillarán azules como antes,
cuando estés ahí conmigo.
El amanecer llegará pronto,
y los cielos brillarán azules como antes,
cuando estés ahí conmigo.
II
Tú eres mi vida, Tú eres mi Señor.
Compañero de cada día, sombra cercana a mí.
Enseñándome a ser humano y dándome verdad y vida.
Contigo mi vida emerge resplandeciente.
Sin mi propia elección, obedezco Tu ley.
Como auténtica criatura, vuelvo a Tu lado.
Viviendo en Tu presencia, hablo contigo y oigo Tu voz.
Ya no esperarás más en la solitaria distancia.
En Tu compañía, ya no temo a la tempestad.
Cuando la noche me cubre, ya no estoy solo.
Contigo a mi lado, afronto el peligro, los problemas.
En Tu compañía, los viajes no serán tan duros.
Atravesaré los caminos con baches,
darán paso a una hermosa primavera.
El amanecer llegará pronto,
y los cielos brillarán azules como antes,
cuando estés aquí conmigo.
En Tu compañía, ya no temo a la tempestad.
Cuando la noche me cubre, ya no estoy solo.
Contigo a mi lado, afronto el peligro, los problemas.
En Tu compañía, los viajes no serán tan duros.
Atravesaré los caminos con baches,
darán paso a una hermosa primavera.
El amanecer llegará pronto,
y los cielos brillarán azules como antes,
en Tu compañía.
De “Seguir al Cordero y cantar nuevos cánticos”
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